Puede que me equivoque muchas veces, demasiadas quizás... Puede que me de cuenta de lo que quiero cuando ya no lo tengo o cuando es complicado conseguirlo, que mi lista de caprichos sea larguísima, que mis paranoias aumenten día si y día tambien, puede que los malos momentos sean muchos, aunque los buenos los superan. Puede que complique lo difícil, que facilite lo difícil, y que también puede que tropiece mil veces con la misma piedra, pero ten por seguro que siempre me voy a levantar. Siempre.